Natural del municipio de Saladoblanco, estudiante de una institución educativa de Pitalito en sus primeros años, profesional en Derecho de una universidad en Neiva, batalladora como la que más, ha ido conquistando espacios en el difícil trasegar de la política regional.
Por varios años luchó para abrir una ventana en los tradicionales partidos grupos políticos del Huila, sin éxito.
Sin desmayar, con don de liderazgo innato, se abrió paso en Neiva, recorriendo los barrios, casa a casa, para contarle a la gente que, se proponía ir al concejo de la capital, con el propósito de encarnar la defensa de las mujeres que padecen el flagelo del maltrato y la intolerancia.
Con su presencia en las comunidades, con su discurso sencillo, sin adornos, enfocada en cada situación social que tocaba, alcanzó la 5ª mejor votación de las listas al concejo neivano.
Fue elegida presidenta de la Corporación y desde allí libró una gran batalla, defendiendo lo que considera justo y en beneficio de la ciudad y sus habitantes.
Ahora se proyecta en el departamento del Huila como seria aspirante a conquistar una curul en la Asamblea del Huila, y ha emprendido una aguerrida campaña por los municipios.
Recientemente visitó el municipio de Pitalito, donde se reunió con lideresas de la ciudad, convocó a dirigentes de la comunidad y les contó su proyecto político.
Victoria Castro, es hoy la nueva figura de la política regional, reconocen dirigentes de una nueva generación política en la ciudad de Pitalito, propósito en el que la acompaña la aspirante al concejo laboyano, Sandra Blanco.